sábado, 17 de enero de 2015

Nada Justifica la Violencia



En estas semanas compulsas con todo lo que está aconteciendo en el mundo, no soy capaz de mirar hacia otro lado y en mitad de la repulsa total a cualquier acto violento y en especial a cualquier acto terrorista como los acaecidos en París, piensas sobre que motiva al hombre a practicar la violencia.
Siento que es un problema de base, de la educación, de la falta de valores en nuestra vida, de sentirnos en muchos momentos perdidos y dejarnos llevar por unos fanatismos que no nos llevan por el camino correcto.

Sin ninguna duda, yo creo en la Libertad de Expresión, cada uno debe poder ser libre para expresar aquello que piensa, pero debemos ser conscientes, que nuestra palabra puede provocar un efecto distinto al que querías en oídos de otro y que somos libres sí, pero deberíamos usar nuestra palabra con respeto y con tolerancia.

En esta ocasión ha sido unos dibujos de Mahoma caricaturizados lo que ha provocado el incendio en unas personas que por su fanatismo ya estaban con la llama preparada, nadie debería actuar así…

Sin embargo y salvando las distancias, cuantas veces nos ha pasado que un comentario de una persona, en un ambiente jocoso, en vez de tomárnoslo como lo que es, una broma, nos ha sentado mal.  Hay muchos comentarios que nos afectan, quizás deberían generar indiferencia o saberles reír la gracia, pero a veces nos crean un dolor tan grande, que nos hunden y en muchas ocasiones contestas a ese comentario con aún más contundencia, generando un conflicto, que puede terminar en violencia.

Hace años, este mismo semanario, publicó una portada, sobre atentados terroristas en España, yo lo veo y realmente me parece original, entiendo en el contexto que se crea y me gusta, pero gustará a las víctimas de ese atentado?? Y quizás estas víctimas sean personas que no vayan a reaccionar con ira, pero a otras que solo están buscando una escusa para hacer el mal, es más de lo que necesitan.

Pensamos que no somos personas violentas, que no haríamos nunca algo así, pero por ejemplo estamos viendo un partido de fútbol e insultamos a rivales, al árbitro e incluso ovacionamos una entrada desproporcionada de un jugador de nuestro equipo a un jugador rival, solo por la frustración de sentirnos derrotados.

No sé, por qué actuamos así, pero no hay nada, pero nada, que justifique la violencia, nada. Pero reflexionemos un momento, y démonos cuenta que hay una delgada línea entre el respeto y la libertad, que a veces se traspasa y genera violencia en una serie de personas fanáticas. 

Yo no puedo cambiar el mundo, ni cambiarte a ti, pero siento que la vida puede ser maravillosa y que los violentos no tienen cabida en ningún sitio, así que se libre y respeta a los demás.
 


Yo soy Charlie, y tú?