Hay días que te levantas mal, no
te sientes bien contigo mismo, tienes ganas de que las cosas fueran de otra
manera, miras atrás, piensas, te sientes extraño. No sabes bien si estás
llevando la vida por el camino que te gustaría llevarla.
Echas de menos a esas personas
que ya no están, que se fueron, que no volverán. Ves la vida que siempre has
deseado y te comparas y sabes que eso que querías no es la que tienes y que el
guión no está siguiendo las líneas que tenías escritas.
Entonces te hundes más, dudas de
todo, te vuelves exigente contigo mismo y con todo, y te proteges, te pones un
escudo, otro, y si es necesario un tercero. Te auto convences de que estas bien
y con eso sales a la calle, más fuerte, sí. Pero más alejado de la vida, más alejado
de lo que eres, más lejos de ti.
Es normal que se tengan días así,
es normal que haya días que se dude de todo y que no estemos plenamente satisfechos
por nada, pero debemos escucharnos, debemos reflexionar sobre lo que queremos y
lo que podemos hacer y dar un sentido a cada día con un objetivo. Pero que no
te ciegue esa meta, mira el medio con el que llegarás a él, quizás ese medio te
haga ser de nuevo lo que no eres, lo que no quieres y volverás de nuevo al
inicio.
Sé fuerte, pero sé tú, llora si
tienes que llorar, di lo que sientes, no te calles si sientes que no debes
hacerlo, y sobre todo conócete.. El guión lo escribes cada día, tú diriges tu película,
tu vida.
Yo sé quién soy y tú??
Quizás sea necesario, en algunos momentos, detenerse, y pensar quienes somos. La vorágine diaria en momentos nos distancia de nosotros mismos, Ser uno mismo a veces es difícil. Aunque lo primero sería saber quienes somos.
ResponderEliminarGracias Dave, por hacernos reflexionar..